Este blog se llama Itinerante porque pretende ir de un lado a otro. Porque las historias se encuentran en los lugares más insospechados. Porque las que vemos en películas o en obras de teatro no son solo personajes haciendo cosas: hay mucho más detrás. Porque, entre tantos torrentes de información, a veces ni siquiera nos enteramos de las posibilidades. Itinerante nace con dos intenciones básicas, entonces: opinar y difundir, si viene algo más en el camino, se verá.

Pero el momento histórico que vivimos necesita mucho de estos dos verbos.
Se necesita opinar (de forma informada, muchas gracias) porque la costumbre es no hacerlo, porque nos basta ir al cine o al teatro, comer papas fritas a la salida y listo, ¡linda salida! No es que sea malo buscar solo entretenimiento (de hecho, el cine de género en Perú pega mucho porque prácticamente le promete al público qué va a ver), pero no es posible ignorar que estamos siendo partícipes de un mensaje construido por un director, una directora, el elenco de una creación colectiva, la productora audiovisual (si creías que Disney está reviviendo sus clásicos solo porque quiere alimentar tu nostalgia, tal vez no estás pensando en toda la plata fácil detrás). Hay que opinar, construir nuevas ideas sobre las historias, porque enriquece la experiencia, es fuente de discusión si has ido en grupo y, aunque no siempre lo notemos, cimienta las ideas que uno mismo tiene sobre determinados asuntos: piensa en todas las comedias románticas que le hacen creer a tu prima que un día llegará un college guy a conquistarla o cuántos imaginan encontrar a su miraflorina, conquistarla con picardía y tener su trilogía de la felicidad a lo Asu Mare. Las historias siempre dicen más de lo que parece.

También se necesita difundir, y este verbo puede aplicarse a muchos espacios. Por un lado, difundir, entre tanto blockbuster, la posibilidad de encontrar otro tipo de películas, con otros usos de lenguaje audiovisual más allá del BUM, ¡Liam Neeson!, ¡Marvel!, porque no es posible animarse a ver otro contenido o formar una cultura audiovisual de otra forma. Difundir teatro que casi siempre necesita el boca a boca para que el público se anime a llenar su butaca. Difundir arte en general porque sigue formando parte de debates elitistas, la información llega a unos pocos y la posibilidad de costear se reduce aún más